martes, 15 de abril de 2008

La Mejor Entrevista.

Una vez un hombre muy afortunado había conseguido la mejor entrevista de su vida:.

Iba a entrevistar ni más ni menos que a Dios. Esa tarde el hombre llegó a su casa dos horas antes se arregló con sus mejores ropas, lavó su automóvil e inmediatamente salió de su hogar. Manejó por la avenida principal rumbo a su cita, pero en el trayecto cayó un aguacero que produjo un embotellamiento de tránsito y quedó varado.

El tiempo transcurría, eran las 7:30 y la cita era a las 8:00 horas. Repentinamente le tocaron el cristal de la ventanilla y al voltear vio a un chiquito de unos nueve años ofreciéndole una caja llena de alfajores.

El hombre sacó algún dinero de su bolsillo y cuando lo iba a entregar al niño ya no lo encontró.

Miró hacia el suelo y ahí estaba, en medio de un ataque de epilepsia. El hombre abrió la puerta e introdujo al niño como pudo al automóvil. Inmediatamente buscó salir del embotellamiento y lo logró, dirigiéndose al hospital más cercano. Ahí entregó al niño, y después de pedir que lo atendieran de la mejor forma posible, se disculpó con el doctor y salió corriendo para tratar de llegar a su cita con Dios.

Sin embargo el hombre llegó diez minutos tarde y Dios ya no estaba. El hombre se ofendió y le reclamó al cielo:.

- Dios mío, te haz dado cuenta, no he llegado a tiempo por el niño, no me pudiste esperar.

¿Qué significan 10 minutos para un ser eterno como tú?.

Desconsolado se quedó sentado en su automóvil; de pronto lo deslumbró una luz y vio en ella la carita del niño a quien auxilió. Vestía el mismo suetercito deshilachado, pero ahora tenía el rostro iluminado de bondad.

El hombre, entonces, escuchó en su interior una voz:.

"Hijo mío, no te pude esperar y salí a tu encuentro".

4 comentarios:

  1. la historia esta muy bien....y este señor nunca se hubiera imaginado que el encuentro co el nuño seria SU DIOS...ahora sauvignona dice....si este señor...tuvo la dignidad de ayudar al niñito ...con eso le tendria que haber bastado...porque es una actitud grandisima....
    juan pedris un besin y un abrazooooooo

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  2. ¡Que suerte tienen algunos! Fíjate, Dios salió a su encuentro, en cambio, para otros, por mucho que lo llames, no te da ni cita, parece que se hiciera el sordo.

    No me puedo creer que ayer estuviéramos visitándonos mutuamente al mismo tiempo. ¡Que casualidad!! :D

    Saludos y buenas noches.

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  3. Juan...cariño Ala siempre esta esperandonos...que hermoso relato...gracias... es verdad tu blog alimenta el espiritu...al menos el mio...


    besitos...

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  4. Mercé dice, que bonito relato, Dios o lo que quieras,siempre esta en todsa partes, lo que pasa es que aveces no lo vemos o no queremos verlo, si miras la Naturaleza allí lo encontrarás...

    mi blogs

    mercedescardona.blogspot.com

    besos

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